Todo lo que hace alguien por un poco de libertad
A veces las peleas de pareja son insoportables. El cariño no es suficiente para entender o soportar aquellas cosas que simplemente nos sacan de quicio. Ni el amor de todo el mundo, pienso, puede ir en contra de lo que nos agrada o desagrada de alguien. Es algo así como una fuerza imparable se choca con algo inamovible. ¡La respuesta es un completo absurdo!
Claro que estas discrepancias tienen su mística cuando el matrimonio está de por medio. Ya no puedes hacer nada ante lo que Dios unió, al menos así piensan los antiguos o quienes sí se toman en serio este ritual de máximo juramento. Porque, claro, casarse por religión no solo significa una boda más bonita a nivel escenográfico, también es un compromiso ante el Todopoderoso. Más allá que exista o no, si te casas por religión, estás asumiendo que existe. De lo contrario, ¿qué sentido tiene?
En fin, todo esto me lleva a una historia algo extrema de quien simplemente no pudo continuar con su pareja, a pesar del tiempo y de los compromisos. Si ya estás harto de tu enamorada de dos meses, lee esto y no jodas con tu drama.
Leonard Olsen, de 70 años, fue arrestado por la policía del estado de Florida, Estados Unidos, por conducir a más de 160 km/h. Los agentes lo intervinieron y le preguntaron a qué se debe tanto apuro. El hombre, muy tocado de los nervios, confesó que su intención era atraer la atención de la policía para ser arrestado y así «ir a la carcel» en vez de volver a casa con su esposa.
Olsen explicó, además, que su mujer lo trata como a un sirviente a pesar de su avanzada edad. Fue por esta razón que tomó el coche para acelerar con todo en la carretera y así ganarse el ticket directo a prisión.
Lástima que su propósito no llegó a concretarse. La policía a lo mucho pudo arrestarlo y recluirlo en la carceleta por poco tiempo. No tiene otra que volver a ver a su esposa.
No se sabe más acerca del pobre Olsen, menos aún de cómo continuó su relación luego de tremendo papelón que fue noticia internacional, pero podemos hacernos una idea de su psique al ver el video en el que aparece por el techo del coche, alzando los brazos como si pudiera abrazar a la libertad.
Una pose bastante épica para quien no quiere saber más de relaciones sentimentales.