“Ni el roble crece bajo la sombra del ciprés ni el ciprés bajo la del roble”
De la colección de libros que he podido almacenar en mi cuarto, siempre me llamó la atención “El Profeta”, de Gibran Jalil Gibran, porque la obtuve hurgando entre las cosas de mi fallecido tío Mario. Lo curioso es la dedicación que tiene en sus primeras páginas y las anotaciones que él hizo en vida durante la lectura, detalle que me conmueve al saber que tiene los mismos gustos por los míos en lo que respecta a pasajes de tan bellos poemas. En fin, este ha sido uno de los pocos…
Leer más