Por qué los zapatos son los regalos perfectos
Vuelvo con la poesía china. En una anterior publicación, compartí un fragmento del libro Poesía china (Siglo XI a.C. – Siglo XX), de la editorial Catedra – Letras universales. Ahora, traigo un poema bastante triste y hasta curioso si es que no sabes qué regalar a alguien especial.
Y lo mejor que puedes obsequiar es un par de zapatos. ¡Piénsalo bien! Hay cierta mística si es que analizas el asunto y no te detienes en lo que «es», sino en lo que «puede ser» acompañado de unas palabras mágicas. El detalle no está en el objeto en sí, sino en cómo es que regalas algo tan sencillo para que se vuelva eterno.
SOBRE BAI JUYI
Antes hablemos del autor. Bai Juyi fue uno de los más grandes poetas de la dinastía Tang (618 – 907) junto con Li Po (701 – 762) y Du Fu (712 – 770). Nació en Xinzheng, provincia de Henan, en China, en el año 772.
Uno de sus poemas más populares es ‘Canción del dolor eterno’, cuya importancia al legado cultural chino hace que sea estudiado en las escuelas. Su estilo, además, es recordado por su simpleza y atractivo para las masas. No por nada es conocido como el ‘Poeta del Pueblo’.
Bai Juyi falleció en 846 y dejó un legado de 2806 poemas.
«MI AMOR»
Ahora sí, vayamos con el poema titulado ‘Mi amor’.
Sacando mis prendas húmedas
para secarlas al sol,
salta a mi vista un par de zapatos,
obsequio de la bellísima hija de la vecina.
Aún resuena en mis oídos
lo que dijo al regalármelos:
«Es un testimonio de mi amor.
Espero que no nos separemos
como estos zapatos
que van siempre juntos.»
Desde que fui desterrado,
soy una hoja que flota en el río.
He recorrido leguas y leguas,
mas siempre me los llevo conmigo.
Ahora los miro y remiro,
sumergido en la tristeza:
Los zapatos siguen pareados,
pero yo estoy solo, lejos de ella.
Además, con las interminables lluvias,
ya aparece moho en la pala de seda.