Feliz día, papá

Hoy es el ‘Día del Padre’. Para no ser hipócritas, no lo publico en Facebook, pues mi viejo no tiene cuenta, así que mejor dedico una breve reflexión en este blog con la esperanza de que un día sepa él que, efectivamente, escribo más allá de las responsabilidades laborales.

En mi familia, cuando nos toca celebrar esta fecha, suelo prestar atención especialmente a mis hermanos sin que lo noten. Mi hermana Andrea es un ejemplo de mujer nacional, porque es padre y madre para mi ahijado David, un simpático varoncito de 3 años. Por su parte, mi hermano Alex también es un mérito al hombre peruano al haber enfrentado los nervios de ser papá a los 22 años sin pensar en el aborto. El resultado de dicho desafío ha sido una alegre niña llamada Nicole, quien ahora tiene 6 años.

Mi padre, Hugo, es un caso especial. No quiero ahondar en nuestras discrepancias, pero ahora -gracias al ayahuasca- estoy internamente en paz con él, aunque él no lo sepa. Sea como haya sido su actuación, la cual no cuestiono, algo es muy cierto respecto al rol paternal. Cito a Gregorio Marañón: “Padre no es aquel que cría y engendra, padre es aquel que educa y orienta porque solo educando al niño de hoy, podrás exigir al hombre de mañana”.

Piénsalo. Si ya eres papá, no creas que tu hijo agradecerá tu billetera, sino tu amplia experiencia para que él mismo logre sus sueños gracias a tu dedicación.