Coming soon

No sé exactamente en cuántos días podré recuperar lo que mi inmadurez hizo que perdiera hace siete años. Acaso no les pasa que recuerdan haber hecho algo estúpido en el pasado y experimentan en la actualidad una especie de vergüenza ajena. Digamos que algo así siento ahora, salvo que recuperé la oportunidad de reivindicarme por haberme alejado de Karla, alguien especial en los momentos que postulaba a la universidad.

Al futuro encuentro lo hemos llamado ‘Coming soon’, como si se tratase de un tráiler sobre una película que está por estrenarse. Eso me recuerda esta vieja publicación sobre cómo la vida puede ser nominada a los Oscar, detalle por el que aprecio su camaradería por la improvisación.

Debo ser alguien con suerte por no haber perdido la fluidez, así como el humor en cada charla casual por Facebook. Me pregunto a qué se deberá, pues tengo otros amigos con quienes no puedo compartir tal cómodo ambiente.

También tengo la duda sobre cómo será cuando la vea en vivo y en directo. Tartamudearé un poco, pienso, así como no la veré a los ojos en los primeros instantes hasta acostumbrarme a su mirada. Ella seguro me recuerda con la personalidad del ‘André’ del pasado, por lo que tendré que lidiar con algunos aspectos inmaduros de esa época. Resulta extraño, en este punto, cuando se piensa en lo que hará uno mismo, pero no en cómo actuará la otra persona. Eso mejor se lo dejamos al destino. Solo espero que el destino no esté en mi contra.