Pretendo enfrentarme a la realidad mediante los protocolos del desaparecido. Hacerme confuso de intenciones y de pocas palabras cuando las palabras no son suficientes para hacerme entender. Así creo ser parte de mi historia, un relato salvaje de rutinas y frascos de ansiedad con descuento a días olvidables. Para luego dejarme caer por tiempos según quien me acompañe al envejecer. Que hoy soy más joven que nunca aunque de joven mantenga las ganas de pertenecer a donde nadie haya pertenecido antes, un sitio donde exista para los demás así yo no esté más.
Mi espacio


Deja un comentario