Miedo
De ser yo tus miedos y tú los miedos que no confieso, cómo culparte de la poca confianza que me tengo si por miedo se me huyen de los labios tus besos. Y el silencio aprieta los nervios como si me ataras a nada que por nada acaso el miedo dice haberme enamorado, mientras esperamos a que mañana se disiparan los sueños, a despertarnos sin sentirnos miedo.