Amor
Hubiese preferido no amarte nunca para nunca haber amado de verdad. Aunque me odies por las razones más justificadas del amor, no prometí que por amor sería el hombre perfecto para ti, porque amarte fue entregarte también lo peor de mí. Las mentiras descaradas, el sexo sin amor de los engaños y el irremediable pesar de estar convencido de que pudiste amarme por siempre a pesar de mi, y es que te amé a pesar mío aunque nos haya dolido amarnos hasta desprendernos del amor.
No te culpo ni me culpes, ni te culpes a ti misma. Que de amor soy irreparable y por amor creíste haberme sanado cuando nunca confesé haber estado incompleto en mis maneras de amar, pero que aún así, así herido de alma, no digas nunca que no te pude amar de verdad. Te amé a pesar de mi verdad.
Que fuerte y que cierto