¿Quién sabe por qué…?

¿Quién sabe que las verdades
son las mentiras que te convencen?
Sabes acaso que no hay noche oscura
sino la sombra de tus parpados al dormir.
¿Quién sabe que viniste a mi
o si regresabas derrotada
o si volvías
porque no tenías a donde ir?
Cómo crees en el destino
cuando las oportunidades
me las cortas
como a las venas
cuando dices que no hay más destino.
Pues cómo es que me insultas
para reconocer lo sublime.
Cómo haces que te crea
con certeza y fe
cuando hacemos escaleras de dominó
para rozar el cielo.
¿Pues cómo sabes tú que yo escribo esto?
¿Estas líneas patentadas por el misterio?
¿Cómo es que no sabes?
Si soy fotografía amarilla del recuerdo
o negativo de una foto por revelar.

Foto: Duncan Hull – Flickr. Bajo licencia de Creative Commons