¿Qué animal te gustaría ser? Si dices elefante…

Recuerdo aún las enseñanzas de filosofía en la Universidad y entre ellas se destaca el anima mundi, aquella fuerza subyacente en toda la naturaleza, incluida los seres humanos. Esta idea de una energía universal hace que siempre pregunte a las personas qué animal gustarían ser, así determinas parte de su personalidad.

Perros, gatos, iguanas… Muchos animales he escuchado en mi vida. Personalmente, siento que tengo mucho carácter de tortuga: lento, pero seguro con un caparazón en donde se encierra para sentirse protegido. Sin embargo, creo que nadie me ha hablado de un elefante. Si tú, querido lector, me dices que tienes algo de elefante, te contaría la siguiente historia.

En un país asiático, creo que la India, los elefantes son atados a un árbol gigantesco desde muy pequeños para que no se escapen. Cuando crecen, basta con atarlos a ligeras ramas para que eviten siquiera huir tras años de intentos fallidos. Pese a su gran fuerza en un futuro, las frustraciones hicieron que el animal deje de seguir buscando su libertad por acostumbrarse al pasado.

El relato se adapta a nuestras vidas cuando ahora vemos hacia atrás, sonriendo por todas las trabas que parecían gigantes, pero que ahora son solo parte de la vida ya superada. Aprendamos de los animales si es que estás convencido de que el anima mundi existe, esto hará que halles respuestas en la simple naturaleza de las cosas.